En nuestra acelerada sociedad moderna parece como si mil estímulos diferentes compitieran por nuestra atención las 24 horas del día, incluso cuando conducimos. Algunas de estas distracciones potenciales nos asaltan desde las autopistas de Los Ángeles y el Valle de San Fernando en forma de coloridas vallas publicitarias o señales de tráfico. Pero la mayoría de ellas se producen desde el interior del coche, y pueden provocar accidentes por conducción distraída.
Distraction.gov enumera las tres categorías principales de distracción: visual, manual y cognitiva, y es probable que poseas al menos un dispositivo portátil o montado en el salpicadero que puntúa en las tres categorías. Piense, por ejemplo, en el omnipresente teléfono inteligente. ¿Hablas mientras conduces? ¿Mandas mensajes? ¿Miras las direcciones? Cualquiera de estas actividades puede distraer sus ojos (distracción visual), su mente (distracción cognitiva) o sus manos (distracción manual). Incluso un sistema GPS montado en el salpicadero puede desviar tu atención de la carretera, aunque sólo sea un segundo, pero ese segundo es suficiente para cambiar tu vida.
Las distracciones no se limitan a los aparatos electrónicos. Cualquier cosa que hagas en un coche mientras se supone que estás conduciendo cuenta como un peligro potencial. Comer, beber, encender un cigarrillo, charlar con los pasajeros, revisar un mapa en papel, recoger algo del suelo del coche... todas estas cosas pueden distraerte lo suficiente como para provocar un desastre.
Las distracciones provocan tiempos de reacción más lentos. Así que ese parachoques trasero que pensabas que iba varios segundos por delante de ti ahora está aplastado contra tus faros, y tú o el otro conductor posiblemente sufráis un latigazo cervical o alguna otra lesión traumática por la sacudida de dos vehículos que se juntan. O ese peatón que cruzó en contra del semáforo y que ahora se encuentra en medio de la intersección, necesitando una ambulancia.
Estos sucesos no son en absoluto raros. Distraction.gov informa de que sólo en 2009 se produjeron aproximadamente 448.000 lesiones y casi 5.500 muertes por distracciones al volante. Se trata de los conductores del carril de su izquierda, del carril de la derecha, delante de usted, detrás de usted. No puedes controlar el comportamiento al volante de otra persona, pero sí puedes controlar el tuyo y siempre debes estar atento a los demás.
¿Qué puede hacer para evitar que usted y sus seres queridos se conviertan en una estadística de accidentes de tráfico debidos a distracciones al volante? En primer lugar, puede que tenga que tomar algunas decisiones difíciles sobre sus hábitos cotidianos. Algunos conductores intentan modificar sus comportamientos sin cambiarlos realmente. Pueden, por ejemplo, mantener conversaciones telefónicas con manos libres en lugar de manejar manualmente el teléfono móvil. Desgraciadamente, aunque hayan eliminado la distracción manual, la distracción cognitiva de la propia conversación permanece. Lo ideal es que los conductores eviten atender llamadas, enviar mensajes de texto y consultar el buzón de voz mientras conducen. Si tiene que coger la llamada, debe detenerse en un lugar seguro para que su distracción no ponga en peligro la seguridad de los demás. Si tiene otros hábitos que suelen requerir sus manos, como fumar o comer al volante, considere si estos caprichos merecen la posibilidad de acabar con la vida de otra persona, o incluso con la suya propia.
Es posible que sus familiares y amigos también necesiten información sobre este nuevo estilo de vida más seguro. Pida a sus pasajeros que no hagan mucho ruido y eviten entablar conversaciones innecesarias mientras usted conduce. Los pasajeros deben resistir la tentación de pasarse objetos del asiento delantero al trasero o viceversa, ya que esta distracción visual y manual adicional también puede desviar su atención. Puede parecer menos divertido, pero llegar a tu destino de una pieza hace que todo merezca la pena.
Si ha resultado herido por un conductor distraído, Contacto hoy mismo. Cuanto antes sepamos de usted, antes podremos empezar a construir su caso para obtener la compensación que se merece.