Todos los abogados especializados en accidentes de moto están de acuerdo en que el uso del casco ofrece el mayor grado de protección durante un accidente. Sin embargo, no basta con llevar un casco. Es igualmente importante asegurarse de que usted usa un casco que se construye para adherirse a las normas aprobadas por el gobierno federal, es cómodo de llevar, y lo suficientemente fuerte como para proteger su cráneo de lesiones en un accidente.
Para asegurarse de que su cabeza está protegida en todo momento durante la conducción, utilice un casco que cumpla las normas establecidas por la Comisión Europea. Departamento de Transportes. El casco debe estar certificado y homologado por la agencia federal. Muchos motoristas cometen el error de elegir un casco basándose en su aspecto y estilo, y no en si ha sido homologado por el DOT. Un casco homologado ha sido sometido a pruebas para garantizar que cumple las normas establecidas por el DOT y, por tanto, es probable que proteja su cabeza de lesiones cerebrales en caso de accidente.
En lo que se refiere al estilo del casco, elija uno con la máxima protección para la cabeza y el cuello. En la medida de lo posible, evite los cascos que dejan al descubierto grandes zonas de la nuca o el cuello. Los medios cascos y los cuartos de casco entran en esta categoría porque ofrecen una protección mínima. Los cascos abatibles o modulares son los más eficaces porque ofrecen una protección completa de la cara y, al mismo tiempo, son cómodos de llevar.
Comprueba si el casco te queda bien. Pruébeselo y asegúrese de que no es ni demasiado grande ni demasiado pequeño. Un casco demasiado pequeño te resultará incómodo, mientras que uno demasiado grande puede no amortiguar bien el cráneo.