Si usted o un ser querido ha sufrido una lesión cerebral traumática, sabe lo difícil que pueden hacerle la vida. Las demandas por una de estas lesiones pueden ser complejas y difíciles de entender, pero pueden ayudarle a conseguir el dinero necesario para una recuperación total.
Existen tres tipos principales de lesiones cerebrales traumáticas: leves, moderadas y graves. Las lesiones leves constituyen aproximadamente el 80% de todas las lesiones. Suelen provocar algunos cambios físicos y cognitivos. La mayoría de las personas se recuperan de ellas en seis meses, pero hasta un 15% pueden sufrir problemas a largo plazo.
Las lesiones moderadas y graves suelen ser un problema a largo plazo o incluso permanente. Pueden mermar gravemente las capacidades físicas y cognitivas de una persona. De hecho, puede incluso ser necesario que una persona reciba algún tipo de cuidados durante el resto de su vida. Interponer una demanda en este caso puede ayudar a una persona a obtener el dinero que necesita para recuperarse.
Dicho esto, presentar una demanda por lesión cerebral sufridas en el trabajo pueden ser difíciles. Es necesario demostrar que el empresario cometió una forma de negligencia o una falta intencionada.
Por ejemplo, si no proporcionaron en el lugar de trabajo un número adecuado de cascos protectores y ello provocó directamente la lesión cerebral, puede interponerse una demanda.
También es necesario demostrar que la persona sufrió una lesión cerebral y que ésta no era preexistente. Hacerlo puede resultar difícil.
Sin embargo, si tiene éxito, puede recibir daños y perjuicios tan diversos como gastos médicos, dolor y sufrimiento, servicios de rehabilitación, daños materiales, ingresos y disminución de la capacidad de ganancia.
Por favor, Contacto hoy mismo si necesita ayuda con una de estas demandas difíciles y traumáticas.